Policastro
En sus cielos amenazantes el apocalipsis siempre esta por ocurrir. Hay un sol en la niebla a punto de extinguirse y la lejanía es evocada en una sola pantalla frontal.
La luz crepuscular es plateada cuando gobiernan los fríos y dorada cuando la veladura esconde un amarillo de Napoles.
Nadie sintió la pampa como el.
Sus despojos y taperas no denuncian, piden clemencia.
Fue un militante consecuente pero su pintura, como la de Miguel Diomede nunca necesito ser un panfleto.
Enrique Policastro
La laguna
Pequeño apunte
1955